SAT advierte sanciones por préstamos no declarados: ¿puedes recibir dinero de amigos sin multa?
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) anunció que intensificará revisiones a depósitos en cuentas bancarias procedentes de préstamos entre particulares. Si el monto supera los 600,000 pesos anuales y no se justifica como tal, la autoridad podría considerar el dinero como ingreso y aplicar una multa del SAT por préstamo que va del 50 al 75 % del monto omitido, además de recargos correspondientes.
Expertos fiscales explican que la clave está en la legitimación documental: el contribuyente debe demostrar que los fondos recibidos no provienen de una fuente de actividad gravable, sino de un acuerdo de mutuo. La multa surge cuando el SAT detecta discrepancias entre los movimientos bancarios y la declaración anual.
Ámbitos de sanción y cuantía de multas
- Cuando el préstamo recibido o acumulado más donativos y premios excedan los 600,000 pesos, la obligación de declararlo se activa.
- En caso de no hacerlo, el SAT puede interpretar dichos recursos como ingresos no declarados y proceder a sancionar.
- La multa puede oscilar entre el 50 % y el 75 % del monto omitido, según la gravedad de la omisión.
- Adicionalmente, se puede imponer una multa fija, cuyo rango va desde mil 400 pesos hasta 35 mil pesos, con base en la omisión reportada.
Este régimen busca prevenir el uso de préstamos informales para encubrir ingresos no declarados o fomentar la evasión fiscal.
Requisitos para evitar la multa del SAT por préstamo
Para que un préstamo sea legítimo a efectos fiscales, se recomienda:
- Contrato de mutuo escrito en el que conste monto, plazo de devolución y tasas, si las hay.
- Transferencias bancarias claras, con concepto que indique “préstamo” o similar.
- Conservación de recibos, estados de cuenta y pruebas que respalden la operación.
- Declarar el préstamo en la declaración anual, si el monto excede el umbral legal (600,000 pesos).
- En caso de duda, presentar la Forma 86-A, que permite registrar ingresos extraordinarios no procedentes de actividades laborales o empresariales.
Si el contribuyente cumple esas condiciones, disminuye el riesgo de que el SAT reclasifique el préstamo como ingreso y aplique sanciones.
El endurecimiento fiscal responde a la estrategia del SAT de monitorear movimientos bancarios inusuales para reducir la evasión y garantizar mayor transparencia en operaciones financieras. La medida afecta a particulares que reciban sumas considerables de dinero en su cuenta sin respaldo documental.
Analistas fiscales sugieren que, aunque los préstamos entre amigos y familiares son comunes, deben cuidarse las formas para evitar que se les califique como ingresos. La multa del SAT por préstamo se ha vuelto tema recurrente en medios financieros ante el aumento de auditorías a personas físicas.




