La luna alcanza su última fase llena del 2025 este 4 de diciembre
La luna alcanza este 4 de diciembre de 2025 su última fase llena del año, un evento conocido tradicionalmente como Luna Fría, que podrá observarse en gran parte del mundo durante la noche. El fenómeno ocurre cuando el satélite natural se encuentra completamente iluminado por el Sol y, en esta ocasión, coincide con su tránsito cercano al perigeo.
Última luna llena del año
De acuerdo con calendarios astronómicos internacionales, la fase llena de diciembre marca el cierre del ciclo lunar anual. Este plenilunio recibe el nombre de Luna Fría debido a denominaciones históricas ligadas a comunidades del hemisferio norte que asociaban esta época del año con el descenso de temperaturas. La denominación es de uso tradicional y no implica características astronómicas distintas a las de cualquier otra luna llena.
En 2025, el plenilunio ocurre mientras la Luna se aproxima a su perigeo, lo que provoca una apariencia ligeramente mayor en el cielo. Aunque este tipo de coincidencia suele difundirse de manera popular como “superluna”, no existe una definición oficial por parte de la Unión Astronómica Internacional que respalde ese término.
Condiciones de observación este 4 de diciembre
La iluminación máxima ocurrió durante la tarde del 4 de diciembre, pero la visibilidad óptima se registra después del anochecer. El fenómeno puede observarse sin equipos especializados, siempre que las condiciones atmosféricas locales lo permitan.
La duración de la observación se extiende hasta el amanecer debido a la posición de la Luna en su órbita durante la fase llena. Zonas con baja contaminación lumínica facilitan una visualización más clara de los detalles superficiales del satélite natural. Instrumentos como binoculares o telescopios pueden mejorar la apreciación de cráteres y zonas de contraste.
Características del perigeo en esta fase
El perigeo es el punto de la órbita lunar más cercano a la Tierra. Durante diciembre de 2025, la distancia aproximada entre ambos cuerpos disminuye en comparación con la media mensual, generando una percepción visual distinta. Esta variación es un fenómeno orbital regular.
La proximidad relativa no modifica las fases de la luna, ya que estas dependen del ángulo de iluminación solar. Tampoco altera de manera significativa las mareas, que se ven influidas principalmente por la alineación entre la Luna, la Tierra y el Sol, y no únicamente por la distancia entre los cuerpos.
Importancia astronómica del cierre del ciclo lunar 2025
El plenilunio de diciembre representa el cierre del ciclo marcado por doce lunas llenas a lo largo del año. Este ciclo es utilizado por instituciones astronómicas, calendarios tradicionales y comunidades que organizan observaciones periódicas del cielo nocturno.
La siguiente luna nueva ocurrirá en los primeros días de enero de 2026, iniciando un nuevo ciclo de fases. Calendarios preliminares indican que el próximo año incluirá varias alineaciones relevantes para la observación astronómica, pero hasta ahora no se ha informado de fenómenos extraordinarios vinculados específicamente al satélite natural para los primeros meses.
Visibilidad en México y otros países
En México, el fenómeno puede observarse desde cualquier región del país. La altura de la Luna durante la noche permitirá una visibilidad constante, siempre que no existan nubes densas o neblina que obstruyan el cielo. Hasta el momento, los servicios meteorológicos locales han reportado condiciones variables según la región, pero no se han informado restricciones significativas para la observación.
En países del hemisferio norte y del hemisferio sur también se reportan condiciones favorables para visualizar el plenilunio debido a su posición elevada en el firmamento nocturno.
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