La crisis de salud que nadie está viendo
Imagínate esto: necesitas una cirugía de emergencia, pero no hay quirófano disponible. O peor aún, ni siquiera hay un cirujano cerca. Suena aterrador, ¿no? Pues esa es la realidad de millones de mexicanos. En un país donde la salud debería ser prioridad, la falta de acceso a cirugías esenciales nos está costando miles de vidas y miles de millones de dólares al año.
La Comisión Lancet sobre Cirugía Global revela que 30% de las enfermedades requieren intervenciones quirúrgicas, pero 5,000 millones de personas en el mundo no tienen acceso a una cirugía segura y asequible. En México, 20% de la población enfrenta barreras graves para operarse cuando lo necesita.
Impacto económico:
- La falta de acceso oportuno a cirugías cuesta entre 1.5% y 2% del PIB anual en países en desarrollo. Para México, eso equivale a entre 21,000 y 28,000 millones de dólares anuales.
- ¡Ese dinero podría invertirse en hospitales, educación y tecnología médica!
Enfermedades y emergencias como cáncer, fracturas, apendicitis y partos complicados pueden prevenir muertes y discapacidades si se atienden quirúrgicamente. Pero si la atención es tardía o deficiente, las consecuencias son devastadoras: más mortalidad, más discapacidad y más desigualdad.
Etiopía y Zambia ya implementaron Planes Nacionales de Cirugía y están viendo mejoras en salud y economía. Invertir en cirugía no solo salva vidas, también fortalece la economía y reduce la pobreza.
Solución: ¡Plan Nacional Quirúrgico ya!
Para dejar de perder vidas y dinero, México necesita:
- Más cirujanos y tecnología: Al menos 20-40 cirujanos, anestesiólogos y obstetras por cada 100,000 habitantes.
- Formación continua: Capacitación constante, telemedicina e inteligencia artificial para mejorar la atención.
- Mejor coordinación: Red de hospitales eficientes y mejor comunicación entre niveles de atención.
Invertir en cirugía no es un gasto, es una inversión con retorno. Es hora de exigir un Plan Nacional Quirúrgico que garantice acceso a operaciones seguras, oportunas y asequibles para todos. ¡México no puede seguir ignorando este problema!
