Este viernes, un fallo informático de proporciones globales ha generado una serie de afectaciones significativas en diversos sectores alrededor del mundo, incluyendo la industria aeronáutica, telecomunicaciones y bancos. En el corazón de esta crisis se encuentra una actualización de ciberseguridad implementada por un proveedor de Windows, específicamente Crowdstrike, que ha causado problemas en sistemas operativos de diversas aerolíneas y terminales aéreas. En México, el impacto es particularmente notable en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), donde las principales aerolíneas han suspendido sus vuelos hasta nuevo aviso debido a la caída del sistema Windows.
Este incidente ha provocado retrasos y cancelaciones masivas, afectando a miles de pasajeros que esperaban embarcarse en vuelos internacionales. Es importante destacar que, según la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), los sistemas de navegación aérea mexicanos no han sufrido ninguna afectación. Esto se debe a que utilizan herramientas y sistemas propios, diseñados para ser resistentes a interferencias externas, lo que garantiza la seguridad y continuidad de las operaciones aéreas. Además del AICM, otros aeropuertos como los de Querétaro y Cancún también se han visto afectados por esta falla tecnológica. Los pasajeros en estos aeropuertos han enfrentado largas esperas y complicaciones adicionales, ya que las aerolíneas han tenido que recurrir a métodos manuales para gestionar los pases de abordar.
En medio de este caos, los usuarios han mostrado su ingenio y sentido del humor, compartiendo en redes sociales momentos anecdóticos de la situación, como la idea de crear camisetas con el lema “Yo sobreviví el caos cibernético 2024” en el Aeropuerto de Cancún. Este incidente subraya la importancia de contar con sistemas de seguridad robustos y planes de contingencia efectivos para mitigar el impacto de posibles fallos tecnológicos en infraestructuras críticas. Mientras tanto, las autoridades y empresas afectadas trabajan incansablemente para restablecer la normalidad en las operaciones aéreas y minimizar las molestias para los pasajeros afectados por esta falla global de Microsoft.
