La muerte de Alonso ocurrió en enero de 2025, tras una explosión causada por una fuga de gas natural, que aparentemente se filtró desde las tuberías ubicadas en la vía pública hacia el drenaje y de ahí a la coladera del baño de su domicilio, en la colonia Lindavista, del municipio de Querétaro.
Los peritajes realizados posterior a los hechos, determinaron que la acumulación de gas se registraba en concentraciones del 20%, por encima del límite permitido por la Norma Oficial Mexicana (NOM-007-ASEA-2016) que es del 15%.
Alonso iba a bañarse, cuando al calentar el agua con una resistencia se generó la explosión. Ésta le provocó quemaduras graves en el 60% de su cuerpo y daños en vías respiratorias, riñones, corazón y pulmones, que derivaron en su fallecimiento.
Cabe destacar que, de acuerdo con la familia y vecinos de Alonso, la fuga fue reportada sin que la empresa responsable de gas natural, Protección Civil Municipal o Estatal ni Bomberos atendieran el llamado.
La madre de Alonso denunció que tras los hechos la empresa gasera evade su responsabilidad y que han ocultado incidentes similares en la zona, atribuyéndolos erróneamente a otras causas.
La Fiscalía Estatal abrió una carpeta de investigación, pero la familia denuncia inconsistencias y falta de apoyo por parte de autoridades, incluyendo al gobernador y al presidente municipal de Querétaro.
Por todo esto, están convocando a una marcha pacífica el próximo 17 de julio a las 7:30 am en Palacio de Gobierno, para exigir justicia y que el caso de Alonso no quede impune, pues fue a causa de algo que pudo ser evitado, si se hubieran atendido los reportes y se hubieran realizado las inspecciones necesarias al servicio.
