Tras un triunfo revitalizante en el Clásico contra San Luis, los Gallos de Querétaro se preparan para un reto mayúsculo: visitar a un siempre complicado equipo de León en su estadio.
El ambiente en el campamento de los Gallos de Querétaro es de total optimismo. Tras un triunfo revitalizante en el Clásico contra San Luis, el equipo se prepara para un nuevo y mayúsculo desafío: visitar a un siempre complicado equipo de León en su estadio. Este encuentro no solo pondrá a prueba el buen momento del equipo, sino que también medirá el impacto de los nuevos refuerzos.
En lo que va del torneo, Gallos Blancos ha demostrado su fortaleza, especialmente jugando como local. El equipo viene de dos grandes actuaciones en casa: una importante victoria ante el Atlético de San Luis y un valioso empate contra Atlas.
Nuevos refuerzos para un equipo en ascenso
Para este tramo decisivo del torneo, el estratega Benjamín Mora ha logrado integrar valiosos refuerzos a su plantilla.
Nombres como Víctor López, Diego Reyes y Santiago Homenchenko se suman al equipo queretano para aportar talento y profundidad al plantel.
Diego Reyes, el más reciente en llegar, ha expresado su total felicidad por el recibimiento que ha tenido en Querétaro. “Me siento muy contento, muy agradecido, y voy a tratar de representar a esta institución como se merece”, afirmó con gran entusiasmo.
El delantero ve en este desafío una “gran oportunidad” para lograr cosas importantes con el club y ha dejado claro su compromiso desde el primer día.
Sobre el crucial enfrentamiento en la casa de la Fiera, Diego Reyes anticipa un partido “muy apasionado, con mucha energía y adrenalina”. Su visión del juego es clara y enfocada en el trabajo en equipo: “Lo vamos a tratar de jugar juntos, compactos, como equipo, para sacar una victoria de allá. Su afición se hace sentir y es una plaza importante”.
